Palencia, en tierra de conejos

Todos sabemos la etimología latina de la palabra España, de Hispania para los romanos (Iberia para los griegos) y los romanos acuñaron el término de Hispania del término que los fenicios dieron a esta península europea, I-spam-ya, que traducido literal sería La tierra de los damanes, o tierra de conejos para los romanos, y para nosotros, geográficamente hablando la península de iberica o hispánica, y políticamente la península donde está España y Portugal.

Este lagomorfo, que con su domesticación y cría en cautividad a dado lugar a cientos de razas ganaderas para carne, pelo, piel y en la actualidad hasta conejos enanos para compañia, era el más abundante de la península y por tanto la dieta de muchos de los predadores más importantes de nuestra fauna.

El hecho de que exista la frase echa de: se reproducen como conejos; es cierta.

Si este pequeño mamífero encuentra un lugar donde vivir y establecer sus vivares, con agua, comida y refugio, pronto tiene lugar la explosión demográfica, que por suerte no era plaga si existian sus depredadores más especializados. Más detalles del Orictolagus cuniculus los podeis encontrar en las guías y en la red, yo os mis fotos.

Primero el lugar donde se pueden observar a las horas del alba o el crepúsculo:

Luego los primeros indicios que se han de buscar si las horas de observación no son las adecuadas. Estos rastros son:

1. Los cagarruteros, con los que marcan su territorio:
   
   
2.  Las huras o vivares escondidos entre la hierba o la maraña de arbustos, con la entrada sobada por el entrar y salir de los inquilinos:

      3. Huellas, de tamaño con referencia a una moneda de 50 céntimos de euro:

      5.   Pelo, desprendido en una pelea, o por cambio de pelaje:

Y cuando las horas son las idóneas, y con movimientos pausados, se puede disfrutar de esta escena o similares. Cuando pueda cargo un vídeo donde se observa un macho joven intentando copular con otra hembra juvenil, pero no llega a término, ya que la cópula del conejo es corta en tiempo, pero el macho acaba cayendo de espaldas cuando llega a eyacular. Lo que le falta de aguante lo tiene de insistente, ya que en una hora pueden copular 10 veces. Las conejas no tienen ciclo estral y la cópula es la que la induce a la ovulación. Pariendo a los 33 días una camada de 2 a 8 gazapos, tantos si el alimento es abundante.
Si hay un cambio brusco en el hábitat, como falta de alimento sobre todo, las hembras tienen la posibilidad de reabsorber los fetos en las dos primeras semanas.
Espero que os guste, y en los paseos vespertinos por los arrabales de la ciudad se fijen en sus vecinos de patas saltarinas y colas blancas de algodón.

 Si este conejo tuviera la Mixomatosis, tendría los ojos lagrimosos e inflamados, rojos, como si le fueran a estallar; las orejas algo caídas por debilidad y estaría como un zombie, por así decirlo.

 Conejos tomando el frescor del suelo. Y puede que el que este sentado sea el macho dominante de la parcela.
Y ya he aprendido a colocar vídeos, con lo que enlazo este:

Conejos de campo en la ciudad de Palencia from Luis Miguel Morejón on Vimeo.